El que no considera lo que tiene como la riqueza más grande del mundo es desdichado.
El hombre no es hijo de las circunstancias, sino que son las circunstancias las criaturas del hombre.
No ha de ser dichoso el joven, sino el viejo que ha vivido una hermosa vida.
El hombre que no se contenta con poco, no se contenta con nada.
La necesidad es un mal, no hay necesidad de vivir bajo el imperio de la necesidad.
Llegará un momento en que creas que todo ha terminado. Ese será el principio.
Así como el sabio no escoge los alimentos más abundantes, sino los más sabrosos.
Todo el mundo se va de la vida como si acabara de nacer.
No desarrollas el coraje siendo feliz en tus relaciones personales diarias.