Mostrando entradas con la etiqueta novelista britanica. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta novelista britanica. Mostrar todas las entradas

miércoles, 18 de diciembre de 2019

Frases De Jane Austen-Novelista Británica

Frases De Jane Austen: Fue una novelista británica que vivió durante la época georgiana. La ironía que emplea para dotar de comicidad a sus novelas hace que Jane Austen sea considerada entre los clásicos de la novela inglesa. Hoy te mostrare algunas de las mejores frases de Jane Austen novelista británica.

Frases De Jane Austen



  • Mira en tu propio corazón porque quien mira afuera, sueña, pero quien mira adentro se despierta.

  • Nuestras cicatrices nos hacen saber que nuestro pasado fue real.

  • No hay encanto igual a la ternura del corazón.

  • Una palabra de ti me silenciará para siempre.

  • Muy a menudo, nada más que nuestra propia vanidad nos engaña.

  • La imaginación de una dama es muy rápida; salta de la admiración al amor y del amor al matrimonio en un momento.

  • Debes ser el mejor juez de tu propia felicidad.

  • Estaré calmada. Seré dueña de mí misma.

  • Quizás son nuestras imperfecciones las que nos hacen tan perfectos el uno para el otro.

  • No estoy de humor para escribir; debo escribir hasta que lo esté.

  • Mi corazón es, y siempre será, tuyo.

  • Hay tantas formas de amor como momentos en el tiempo.



  • Finalmente se separaron con mutuo civismo, y posiblemente con el deseo mutuo de nunca volver a encontrarse.

  • Aquellos que no se quejan, nunca se compadecen.

  • Desear era esperar y esperar era esperar.

  • Debo aprender a contentarme de ser más feliz de lo que merezco.

  • ¡Cuán rápido vienen las razones para aprobar lo que nos gusta!

  • En nueve de cada diez casos, una mujer debería demostrar más afecto de lo que siente.

  • Las personas enojadas no siempre son sabias.

  • Siempre he mantenido la importancia de las tías.

  • Mi buena opinión, una vez perdida, se pierde para siempre.

  • La distancia no es nada cuando uno tiene un motivo.

  • La mitad del mundo no puede entender los placeres del otro.